El cineclub del Instituto Comercial Marítimo Pacífico Sur retomó sus actividades con todo después de una pausa por pandemia. Si bien este 2022 funcionó como taller de apreciación de animación japonesa, los estudiantes han podido realizar otros tipos de actividades ligadas a la pantalla, como asistir a los estrenos escolares del Programa Escuela al Cine, coordinar la semana del cine al interior del establecimiento y participar en Proyectemos, un programa del Centro Cultural de San Antonio.
Es en el marco de esta última instancia que, durante octubre, estudiantes del cineclub pudieron programar su propio ciclo de cine de terror con mediación en cada función. Proyectemos es una iniciativa del Centro Cultural orientada a que jóvenes entre 15 y 25 años se capaciten en apreciación, creación, programación y mediación de películas.
“Fue un trabajo en equipo con mucha motivación. Ellos decidieron el tema del ciclo y vimos las posibilidades que teníamos, siempre pensando en incluir una película chilena. Antes de presentar las películas las vimos en el taller, las conversamos y esa misma conversación la comentan también en el foro abierto del centro cultural”, recuerda Eduardo Barraza, profesor de historia y encargado del cineclub.
El 4 de octubre el ciclo comenzó con Noroi la maldición (Kōji Shiraishi, 2005), para seguir el martes 11 con Noche (Inti Carrizo, 2017) y luego Maleficio (Kevin Ko, 2022) el 25 de octubre. “El encargado de cine del centro cultural les advirtió que estuvieran tranquilos si no iba mucha gente, pero a la primera función asistieron más de 100 personas, el ciclo fue todo un éxito”, comenta el docente.
A medida que pasaban las funciones, las y los estudiantes fueron adquiriendo más confianza al presentar y dirigir la conversación. Eduardo cuenta que “para Maleficio, una alumna me pidió presentar la película porque la había propuesto. Esa es la idea, que ellos se pongan frente al público, desafíen ese miedo y hablen de lo que les gusta. Es una actividad genial para ellos, para el colegio y también para el centro cultural”.
Historia del cineclub
El Instituto Comercial tiene un fuerte componente cultural en su PME. Además de los talleres artísticos, durante el año escolar se realizan diversas actividades para celebrar la cultura: el día del libro, la semana de educación artística, el día del cómic, del cine y la música.
La existencia del cineclub partió un par de años antes de que Eduardo ingresara a la Red de Cineclubes Escolares en 2017, con la adjudicación de un fondo para participar en un taller de creación audiovisual en Viña del Mar. La actividad se mantuvo hasta 2020 que se llevó a cabo de forma online y 2021, donde el cineclub tuvo que parar.
“Yo soy super crítico cuando hay profesores que se quejan del comportamiento de los estudiantes en una sala de cine o de teatro. Tenemos que entender que muchas veces los estudiantes no han ido a estos eventos, están acostumbrados a otro tipo de cultura, por lo que la única forma que nosotros como profesores tenemos de formar audiencias es llevando a los estudiantes a ver arte y cultura chilena, es la única forma”, opina el profesor.
Recuerda además que, de los ocho años de existencia del centro cultural de la comuna, solo en una ocasión hubo un problema con uno de sus estudiantes, por una pregunta fuera de contexto: “hemos llevado estudiantes super complejos que dentro de la sala se portan excelente. Siempre nos quejamos de que los niños no quieren cultura, pero sí tienen cultura, solo que es distinta a la nuestra. Algunos niños me dicen que la película es aburrida, pero yo les doy las gracias explicándoles que tuvieron la oportunidad de verla, les aburrió y expresaron que les aburrió”, enfatiza.
Después de este exitoso retorno a la actividad, Eduardo va a complementar el taller de apreciación de animación japonesa con un nuevo cineclub para formar a sus estudiantes en apreciación de cine chileno y creación cinematográfica.
