Este mes nos vamos a la región de Atacama para conocer la experiencia del cineclub escolar creado por el profesor de Lenguaje y Comunicación Cristopher Miranda en Copiapó, quien en su segundo año en la Red de Cineclubes Escolares y a cargo de esta iniciativa en su colegio, trabaja este semestre la experimentación cinematográfica con estudiantes de enseñanza básica.
Cristopher, mientras cursaba el taller online de apreciación cinematográfica que ofrece gratuitamente el Programa Escuela al Cine de la Cineteca Nacional de Chile, tuvo el desafío de crear un cineclub con escolares de primero básico, lo que significó tener que buscar distintas maneras de acercar el lenguaje del cine a los más pequeños. “Como están recién aprendiendo a leer, su aprendizaje era más abstracto, entonces les mostré una película para conocer de la historia del cine de, con un lenguaje sencillo e infantil. Logré desarrollar algunas habilidades del pensamiento como la reflexión, la crítica y la opinión. Ahora quiero plasmar eso en los relatos, para eso trabajaremos la creación de cortometrajes para que cuenten historias”, cuenta el profesor.
Otras actividades que desarrollaron como cineclub en 2016 fue participar de una función de cine en 3D en Copiapó y ver cortometrajes de animación que lograran generar un “asombro” en los niños. Por ejemplo “Tololo Pampa”, una obra animada sobre una ciudad fantasma que aparece en la noche por la carretera, parte del imaginario local de Atacama. En el colegio contaban con el equipamiento técnico para proyectar películas dentro de la sala de clases, «solo faltaba capacitarme yo», ríe Cristopher.
Lo que se aprende en el cineclub no se evalúa con notas. Por ejemplo, en una actividad con estudiantes de 6° básico, Cristopher mostró el cortometraje “El viejo y el mar”, basado en la conocida novela, y tras verlo, se les pidió a los escolares que plasmaran en el papel la percepción de colores y texturas que observaron en la obra. Luego hicieron un afiche con todos los dibujos, y la actividad se desarrolló lúdicamente sin la carga de una evaluación obligatoria.
Otra experiencia que destaca el profesor, es que este año aplicó también la apreciación cinematográfica a los alumnos de segundo medio, con un nivel más avanzado de análisis y reflexiones. Ellos vieron la cinta “Las analfabetas”, parte de la colección escolar entregada por el Programa Escuela al Cine a los profesores de la Red, una cinta que habla mucho acerca la empatía con los demás. Cada escolar terminó su taller elaborando un zoótropo que luego regalaron a los niños de segundo básico. Esto generó un intercambio entre niveles del colegio que no se conocían, y fue motivo de mucha alegría para los más pequeños.
Sobre los beneficios que ha tenido el cineclub en su escuela, Cristopher concluye: “Se potenció bastante el interés por la lectura, y despertó las habilidades del pensamiento que son tan importantes en los niños a partir del cine. Hay poco cine para ellos en la región, pocos contenidos audiovisuales dirigidos a su aprendizaje, entonces hacerlos ver y analizar otro tipo de obras, les enseña a opinar y a criticar, me parece que estas habilidades comunicativas son las más esenciales para su desarrollo».
