A principios de este año escolar, la noticia del Liceo de Cultura y Difusión Artística de Talca llegó hasta el diario Maule Hoy. La institución fue reconocida oficialmente como Liceo Artístico por el Mineduc, lo que significó, entre otras cosas, la implementación de la nueva asignatura Lenguaje audiovisual: cine y fotografía para terceros medios. Esta transformación se dio gracias al trabajo constante en las especialidades de danza, teatro, música y audiovisual que el Liceo imparte para estudiantes desde quinto básico.
“Ahora hay tres horas semanales exclusivamente para lenguaje audiovisual. El ramo abarca desde la preproducción hasta la postproducción, fotografía, iluminación, planos, guion”, explica Alejandro Alarcón, profesor de Artes Visuales del Liceo y miembro de la Red de Cineclubes Escolares desde 2015.
Alejandro cuenta que el cine está presente tanto en el currículum como en los talleres extraprogramáticos del establecimiento, recordando sus inicios en 2005 cuando comenzaron a postular a fondos para adquirir equipos. “Ahí compramos las primeras cámaras, luego postulamos a otro fondo y conseguimos la colaboración de Tomás Welss para un proyecto de animación”, comenta.
Los avances técnicos del cineclub dieron un importante retroceso con el terremoto de 2010. “Se cayó el techo y los equipos”, recuerda Alejandro. Sin embargo, con el paso del tiempo han podido recuperar parte de los aparatos y también participar de importantes festivales escolares de cine. “Hemos estado en FESCIES, Ojo de Pescado, Cuento Corto y siempre fue positiva la evaluación, quedábamos clasificados o en un buen lugar. Uno de nuestros puntos más altos fue presentar un cortometraje en el Festival Internacional de Cine en Puerto Vallarta.
Ahora que cada estudiante de tercero medio está produciendo su propio cortometraje, Alejandro puede reflexionar en torno a la educación artística y su impacto para una formación integral. “El arte es un allegado de la educación, siempre dicen que lo más importante para llegar a la universidad son las clases de matemática y las pruebas. No es así, porque el arte desenvuelve, libera y abstrae, hace entender mucho mejor el lenguaje, las matemáticas y la historia, desde las imágenes y el proceso creativo”, analiza.
“El arte trabaja mucho con las emociones, y un aprendizaje basado en la emoción es mucho más efectivo. En la educación no se recurre a este tipo de aprendizaje, se busca acumular y no emocionar. Cuesta hacer entender a los directores, a los profesores de otras asignaturas también”, comenta el docente sobre el valor de las artes y el cine en la educación.
